Hipertensión: el «asesino silencioso» cometido por COVID-19
Antes de la pandemia de COVID-19, no había un aumento significativo del número de jóvenes que padecían hipertensión (presión arterial alta). Pero ahora la situación ha cambiado.
La hipertensión, considerada la principal causa de enfermedad cardiovascular, afecta cada vez a más personas, incluidas las menores de 30 años.
Hipertensión: posible efecto a largo plazo de la infección por COVID-19
A pesar de la disminución del número de nuevos casos de COVID-19 y de ingresos hospitalarios, los médicos advierten que el coronavirus sigue siendo una amenaza: la vacunación debe seguir siendo el centro de la respuesta a la pandemia y sigue siendo el mejor medio para nuestra convivencia a largo plazo con el virus.
Pero mientras las perspectivas de una pandemia se vuelven más optimistas, muchos de nosotros nos enfrentamos a las preocupantes consecuencias de una infección pasada por coronavirus, los llamados efectos a largo plazo.
Incluso si su enfermedad ha sido leve y han pasado semanas y meses desde su infección, puede sentir que su corazón se acelera y late de forma irregular, seguido de dolor en el pecho.
Y no estás solo.
Muchas personas desarrollan problemas cardíacos a largo plazo tras una infección por coronavirus, incluida la hipertensión, que es un riesgo para otros problemas cardiovasculares.
Los estudios han demostrado que este fenómeno es común incluso en personas que no tenían antecedentes médicos que pudieran indicar un riesgo de enfermedad cardíaca. Durante al menos un año después de infectarse con COVID-19 (los estudios cubren este periodo), aumentó el riesgo de alteraciones del ritmo cardíaco y de coágulos sanguíneos mortales en las piernas y los pulmones.
Los epidemiólogos se sorprendieron al descubrir que estos efectos no se limitaban a las personas que tenían problemas de salud antes de la infección por COVID-19.
El riesgo aumentaba no sólo en las personas mayores, sino también en las más jóvenes, y no sólo en las personas obesas.
Las infecciones por otros virus, como el de la gripe, conllevan riesgos similares, pero el problema del COVID-19 es que la infección es realmente global y generalizada.
La pandemia ha aumentado el número de jóvenes con hipertensión
Antes de la pandemia de COVID-19, no había un aumento significativo del número de jóvenes con hipertensión. Pero desde (abril) de 2020, la situación ha cambiado.
La hipertensión, considerada la principal causa de enfermedad cardiovascular, afecta cada vez a más personas menores de 30 años.
Los cambios en el estilo de vida impuestos por la pandemia son también causas indirectas de esta situación.
El confinamiento en el COVID-19 y el trabajo desde casa implican menos actividad física y una dieta poco saludable, lo que ha provocado un aumento de peso en muchas personas. Otro factor importante es la evitación o incapacidad de acudir a las revisiones periódicas con el médico. También lo son las situaciones de estrés relacionadas con la pandemia.
Medición periódica de la presión arterial en casa para mantenerse saludable
La presión arterial alta, también conocida como hipertensión, es una condición en la que la fuerza de la sangre que empuja contra las paredes de las arterias es demasiado alta.
No hay signos visibles, pero puede provocar enfermedades del corazón, infartos, derrames cerebrales, enfermedades renales y otras amenazas para la salud.
La hipertensión puede ser el resultado de una mala alimentación, de antecedentes familiares hereditarios, de la falta de actividad física o del estrés.
La hipertensión es conocida como el «asesino silencioso» debido a la ausencia de síntomas pronunciados, lo que aumenta el riesgo de problemas de salud graves si no se trata a tiempo.
Por ello, los médicos recomiendan medirse regularmente la tensión arterial en casa para mantener una buena salud. Esto le permitirá buscar ayuda médica profesional a tiempo si es necesario.
Un buen tensiómetro digital para el hogar es una herramienta esencial para este propósito. Si estás pensando en comprar uno, ten en cuenta los siguientes aspectos: precisión, opciones de almacenamiento de datos, facilidad de uso, legibilidad de la pantalla y características especiales.
Basándonos en estos criterios, recomendamos:
Tensiómetro BLUEMED
El tensiómetro BLUEMED es un dispositivo médico con certificación CE0413 que se utiliza para controlar la presión arterial y la frecuencia cardíaca en casa. Utiliza el método oscilométrico de medición del flujo sanguíneo.
– El indicador de posición permite obtener resultados precisos
El manguito grande para la parte superior del brazo (de 22 a 32 cm) es adecuado para adultos. Con el indicador para la colocación correcta del manguito, siempre obtendrá resultados precisos. En caso de mala colocación, aparecerá un mensaje de error que le invitará a rehacer la toma.
– Una gran pantalla LED con un indicador luminoso
Al comprobar los resultados en la pantalla LED de 63x82mm del monitor BLUEMED, aparecerá un indicador luminoso para facilitarle la tarea. Sin necesidad de mirar la memoria del aparato, siempre sabrá si debe quedarse tranquilo: estará en verde si su presión está dentro de la norma o en rojo si tiene la tensión baja o alta.
– Dos perfiles de usuario distintos: hasta 90 resultados por usuario
El consejo médico es tomar sus mediciones con regularidad, y el tensiómetro BLUEMED permite almacenar hasta 90 resultados para dos usuarios. De este modo, puede proporcionar a los médicos un conjunto de datos más amplio para que lo examinen si es necesario. Con la medición continua, verá ciertos factores que afectan al nivel de su presión arterial, y evitará aquellos que le afecten negativamente.
– Apagado inteligente
El tensiómetro BLUEMED se apaga automáticamente después de 1 minuto de inactividad, y está listo para ser guardado en su bonito estuche con cremallera.
Las conocidas recomendaciones para obtener una lectura precisa de la presión arterial son estar relajado, no hablar y no esforzarse durante la medición. Para obtener resultados más precisos, descanse al menos unos minutos antes de la medición.